HISTORIA: MI PUEBLO Y SUS LEYENDAS.

Biblioteca Pública Municipal “Isidro Angulo Angulo", San Pedro B. C. Sur.

HISTORIA: MI PUEBLO Y SUS LEYENDAS.

AUTORES E ILUSTRADORES:

AUTORES: CARLOS JAVIER ANGULO CAMACHO, ESTEFANIE VERDUGO HIGUERA, ANA KAREN ABIGAIL, FLORES MOLINA, PAULA VANESA RIOS VERDUGO, JESUS DANIEL ANGULO SÁNCHEZ, SANTIAGO ROMERO SÁNCHEZ Y SAMUEL VERDUGO MURILLO.

LAMINA 1:

San Pedro B. C. Sur, a finales de 1800 era un lugar de descanso de los carretones que viajaban del mineral del Triunfo y San Antonio hacia La Paz. Este Lugar le llamaban las “Dramonas”. Posterior a esa época, la señora Florinda Ángulo Ángulo procedente del Novillo, fue quién le dio el nombre de San Pedro por haber arribado a este lugar un 29 de junio, en el santoral de San Pedro.

LAMINA 2:

En los años de 1930 empezaron a llegar los primeros pobladores a San Pedro. Las primeras familias que se identifican fueron los Ángulo Manríquez, quienes se dedicaban a la ganadería y vendían todos los productos del rancho que allí se producían. Otra de las familias que vinieron a habitar estas tierras fueron los Verdugo y los Molinas, dedicándose a la ganadería y la agricultura, sembraban maíz y frijol en el Gabilán, principalmente para el autoconsumo. Con el tiempo, las rancherías aledañas se fueron haciendo más cercanas con el poblamiento de las tierras intermedias, hasta llegar a constituir un pequeño poblado que ha seguido siendo, como desde sus orígenes, un lugar de paso hacia el sur de la Península, donde su gente le ha dado características propias al pueblo por sus orígenes rancheros, tanto en su cultura regional, gastronómica y la inserción de familias del interior de la república.

LAMINA 3:

En San Pedro de aquellos tiempos, la vida cotidiana transcurría mas tranquila y todos se conocían. No había ningún servicio de agua y de electricidad. No había televisión, teléfono y ni gas. Por lo que los alimentos se preparaban con leña. El agua se acareaba con palancas y barricas para llegar a las casas, y para iluminarse en las noches se usaba la linterna y los changos de tractolina.

Con el paso del tiempo se empezó a construir la carretera. La primera construcción fue la casa del pueblo que sirvió como escuela y para hacer juntas y fiestas. Hoy alberga la subdelegación y la Biblioteca Pública Municipal “Isidro Angulo Angulo”

LAMINA 4:

La gente de nuestro pueblo gusta platicar del acontecer cotidiano de nuestro tiempo presente y pasado, mostrando con orgullo nuestra identidad ranchera. En el pueblo se cuenta que en un tiempo merodeaba por nuestra comunidad un caballo con rabia. En aquel tiempo el pueblo era pequeño y las casas estaban distanciadas unas de otras. Se dice que el caballo con rabia llegaba a galope tirando mordidas y patadas, las personas corrían a esconderse del feroz caballo, quien al llegar al bebedero, sin tomar agua, con la misma arrancaba para atrás. Así estuvieron las personas por algún tiempo hasta que un día, el dueño le dio un tiro en la cabeza y se acabaron los temores para el pueblo.

LAMINA 5:

La gente de mi pueblo gusta platicar de Mitos y Leyendas que han ocurrido aquí. Se dice de un mito que sucedió hace cien años. Que se encontró una huella de víbora de 25 metros de largo y gruesa como la rodada de un barril. Cuando el comandante de los revolucionarios encontró la huella, mandó a su tropa a seguirla a caballo y él dirigiendo tal empresa, mientras la víbora seguía su camino comiéndose lo que encontraba a su paso, hasta llegar a la orilla de la playa del pacífico y se sumergió. Cuando llegaron los revolucionarios vieron cuando la víbora se metió al fondo del mar, vieron perfectamente desde cuando bajó de la sierra y se fue a internarse en el mar y jamás la volvieron a ver.

LAMINA 6:

También cuenta la gente mayor de San Pedro, que en los años de la revolución había gente que tenía mucho dinero. La gente transitaba en carretones jalados por mulas o caballos, no había bancos donde guardar el dinero. Grandes cantidades de monedas de oro y plata fueron enterradas en diferentes partes del pueblo porque llegaban los soldados y se llevaban su dinero, por lo que la gente prefería enterrarlo.

Los ricos rancheros que se negaban entregar su dinero eran fusilados. Cuentan que el más rico de los rancheros fue fusilado porque no quiso decir el lugar donde enterró su más preciado tesoro: una campana de oro. Hay un rancho cerca de San Pedro llamado La Campana donde se cree está enterrada. Cuentan que en una época del año, esa campana se oye sonar, pero nadie sabe para donde. La han buscado por todas partes y no la han podido encontrar y sigue sonando…

FIN